Las lesiones musculares son alteraciones que generalmente se producen al someter al músculo y sus tendones a movimientos y posturas que generan tensión y requieren fuerzas superiores a las resistencias de los mismos, dando lugar a patologías como tendinitis, desgarros y contracturas, en nuestro centro de rehabilitación en Bilbao contamos con diversidad de tratamientos para este tipo de patologías, dentro de los cuales destacan las técnicas manuales las cuales son aplicadas por fisioterapeutas altamente capacitados que tras una valoración previa y a través de su visión integrativa en Fiit Concept determinaran y aplicaran el tratamiento más adecuado.
¿En qué consiste una contractura muscular de trapecios?
El trapecio es un músculo de gran tamaño que va desde la base del cráneo, extendiéndose por el cuello y los hombros hasta la zona media de la espalda, por lo que se divide anatómicamente en tres partes, superior, medio e inferior, este se encarga de estabilizar la escápula y facilitar el movimiento de los hombros y el cuello.
La zona superior del trapecio es la que más suele verse afectada por contracturas…
Pero en ocasiones su funcionalidad puede verse afectada por la presencia de contracturas, estas consisten en la tensión permanente de la musculatura y pueden generar diferentes síntomas y compresión de estructuras como nervios y vasos sanguíneos, generando diversos problemas de los cuales hablaremos más adelante.
Síntomas de una contractura en trapecios
La contractura del trapecio es una lesión permanente e involuntaria del músculo que en cualquiera de sus tres porciones genera dolor y otros síntomas como:
- Tensión en el cuello, hombros y miembros superiores
- Sensación de debilidad muscular
- Restricción de la movilidad del cuello
- Rigidez muscular
- Aumento de la sensibilidad en zonas del cuello, hombros y espalda
En ocasiones pueden presentarse:
- Mareos y vértigos
- Hormigueos en los miembros superiores
- Zumbidos en los oídos
¿Qué causa las contracturas en trapecios?
Existen diversas causas y factores que están relacionados con la aparición de contracturas en el cuello, algunos de ellos son:
- Malas posturas, algunos trabajos como los de transcripción requieren posturas mantenidas por largos periodos de tiempo, en las que, si no se tiene una buena higiene postural, pueden presentarse contracturas del músculo trapecio.
- Uso excesivo, existen movimientos repetitivos que se realizan en algunas actividades o gestos deportivos como la natación que pueden dar lugar a una fatiga muscular del trapecio, generando en estas contracturas dolorosas.
- Factores psicológicos, como el estrés o la ansiedad, que puede generar una tensión en los músculos.
- Desequilibrios musculares: por desajustes en otras musculaturas que pueden llevar a que el trapecio se vea alterado y contracturado.
- Lesiones como un desgarro muscular o una tendinitis pueden dar lugar a una contractura del trapecio.
Tratamiento de las contracturas en trapecios
La aplicación de los diferentes tratamientos para la contractura de trapecios estará condicionada por la previa valoración médica o fisioterapéutica, en esta se realizará una exploración física detallada, en función de diferenciar la contractura muscular de otras afecciones musculares como desgarros o tendinitis, así como determinar la presencia de otras patologías de origen esquelético o nervioso.
Por su parte, el tratamiento médico estará orientado al alivio del dolor, para lo cual se ordenará el consumo de fármacos y la aplicación de cremas y/o ungüentos que relajen la musculatura, y en casos más graves los médicos utilizaran la aplicación de inyecciones o infiltraciones de anestésicos, directo en el músculo.
El tratamiento fisioterapéutico es esencial en este tipo de afecciones no solo porque se encarga del alivio de los síntomas, sino porque además este se encarga de buscar y tratar las causas de la lesión en función de corregirla, previniendo recidivas y otros tipos de alteraciones.
Las técnicas y métodos de fisioterapia que se utilizan en la contractura de trapecios son:
- Aplicación de agentes físicos como:
- Termoterapia que ayuda a relajar la musculatura, puede aplicarse a través de compresas húmedas calientes, aplicación de infrarrojo, fomenteras eléctricas, hidroterapia por medio de baños calientes, entre otros.
- Electroterapia a través del T.E.N.S. o corrientes interferenciales
Aplicación de técnicas manuales como:
- Estiramientos, para elongar la musculatura retraída, además de la musculatura sana para prevenir otras contracturas.
- Masajes relajantes y descontracturantes, a fin de relajar el músculo trapecio, logrando que mejore su rigidez.
- Técnicas de inducción miofascial para restablecer la función del sistema miofascial las membranas que envuelven, sostienen y conectan los músculos.
Otras técnicas como:
- Punción seca, la cual consiste en eliminar los puntos gatillos o puntos dolorosos presentes en el tejido fascial y muscular, a través de la introducción de agujas de acupuntura.
- Terapia de ondas de choque, con estas se lleva energía a los puntos dolorosos, la cual promueve la reparación de los músculos.
- Ejercicios de fortalecimiento de la región alta de la espalda.
- Reeducación postural global con la cual se busca devolver flexibilidad al músculo, eliminar el dolor y restablecer la funcionalidad del mismo.
- Programas de higiene y reeducación postural que eviten que los músculos se contracturen de forma repetitiva, y previene que otros grupos musculares y estructuras ´puedan lesionarse.
Para finalizar te recordamos que en FisioClinics Bilbao contamos con las técnicas anteriormente mencionadas para el tratamiento de diversas patologías, las cuales serán aplicadas por profesionales expertos en rehabilitación de lesiones, neurológicas, musculares y esqueléticas.