Uno de los problemas más frecuentes sobre todo en los adultos mayores son las alteraciones de la marcha, si bien en algunos casos pueden aparecer por el deterioro asociado a la edad avanzada de la persona, en otros se deben a lesiones existentes en el sistema nervioso. Por esa razón, para que conozcas un poco más a fondo de qué se tratan, en nuestro centro de rehabilitacion en Bilbao te brindaremos información sobre su definición, causas asociadas y cómo se pueden tratar.
¿Qué son las alteraciones de la marcha?
Una marcha normal es un proceso preciso y complejo en el cual se necesita tener control sobre todos los movimientos de los miembros inferiores, además de contar con una buena postura y un buen tono muscular. Por lo tanto, se puede decir, que es un proceso en el que se involucra por completo al sistema nervioso, ya que, un grupo de neuronas de la médula espinal y del tronco encefálico deben generar un estímulo que impulse a las neuronas motoras para que estas activan la musculatura de los miembros inferiores.
Una marcha normal es un proceso preciso y complejo en el cual se necesita tener control sobre todos los movimientos de los miembros inferiores
De manera tal, que cuando hablamos de los trastornos de la marcha nos referimos a esas alteraciones que afectan la forma de caminar de una persona, debido a una interrupción en la comunicación del cerebro, la médula espinal y los miembros inferiores. Dichas alteraciones dan lugar a una disminución en la velocidad de la marcha y a una pérdida de la simetría y la sincronización de los movimientos del cuerpo al momento de caminar y pueden ser abordadas mediante una reeducacion de la marcha mediante la fisioterapia neurológica
Las alteraciones de la marcha, suelen ser un trastorno frecuente sobre todo en los adultos mayores, de hecho, se estima que 1 de cada 3 adultos padecen este tipo de alteración. Además, son condiciones que aumentan la mortalidad, debido a las numerosas caídas que puede sufrir una persona como consecuencia de esta condición.
Ahora bien, existen algunas señales que pueden indicar que una persona padece una alteración de la marcha. Entre estas señales se encuentran las siguientes:
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Problemas de equilibrio y coordinación al momento de caminar.
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La persona se cae con frecuencia.
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La persona indica que generalmente siente debilidad muscular, sobre todo al estar de pie o al caminar.
Por consiguiente, si posees algunos de estos síntomas o conoces a alguien que los tengas lo recomendable es que asista a un médico quien tendrá que realizarle diferentes exámenes neurológicos para determinar alguna alteración de la marcha. Esto es un punto muy importante, ya que diagnosticar estás alteraciones a tiempo puede dar indicios de posibles lesiones en el sistema nervioso, lo que a su vez permitirá una atención temprana y por ende la evolución de la misma tendrá un mejor pronóstico.
¿Cuáles son las causas de las alteraciones de la marcha?
Las causas de las alteraciones de la marcha son múltiples, pero en este punto, te mencionaremos las más frecuentes:
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Parkinson.
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Tumores cerebrales.
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Esclerosis múltiple.
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Parálisis cerebral.
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Evento cerebro vascular (ECV).
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Fracturas.
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Asimetría de los miembros inferiores.
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Miositis de los músculos de los miembros inferiores.
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Lesión en la médula espinal.
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Neuropatías.
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Poliomielitis.
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Distrofia muscular.
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Miopatías.
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Atrofia muscular.
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Distrofia muscular.
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Degeneración cerebelosa.
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Hidrocefalia.
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Infecciones.
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Algunos problemas o enfermedades en los pies que puedan alterar la realización de todas las fases de la marcha como, por ejemplo, callosidades, úlceras, inflamación, uñas encarnadas, entre otros.
Cómo puedes ver la lista de las causas que pueden ocasionar una alteración de la marcha es bastante amplia.
Tipos de alteraciones de la marcha
Existen diferentes tipos de alteraciones de la marcha, las cuales dependen de la lesión o patología que la esté provocando, de esta manera se encuentran las siguientes:
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La marcha parkinsoniana, en este caso la persona se observa rígida al caminar y con inclinación de tronco, además realiza pasos cortos y muy rápidos.
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Marcha hemipléjica, se produce como consecuencia de una lesión cerebral. En este caso, la persona posee el pie del hemicuerpo afectado en equino varo y camina haciendo un movimiento de guadaña mientras mantiene el miembro superior en aducción y rotación interna del hombro con flexión de codo y muñeca y el antebrazo en pronación.
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Marcha atáxica, se produce por lesiones en los cordones posteriores, de manera tal que se afecta la propiocepción y el equilibrio, por esa razón, la persona aumenta su base de sustentación al caminar y debe visualizarse los pies constantemente para poder hacerlo
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Marcha claudicante, se produce cuando la persona posee una limitación funcional para caminar producto de un acortamiento o del algún dolor.
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La marcha miopática se caracteriza por presentar un balanceo al momento de caminar producto de una lesión en la zona pélvica de la persona.
Tratamiento de las alteraciones de la marcha
En cuanto al tratamiento de las alteraciones de la marcha en primer lugar dependiendo de la causa el médico le recetará algunos medicamentos al paciente que puedan disminuir el avance del trastorno y en otros casos podrá indicar una intervención quirúrgica para su resolución. De igual manera, también podrá indicar el uso de órtesis o dispositivos de ayuda que le permitan caminar con mayor facilidad.
Sin embargo, independientemente de la medida que vaya a tomar el médico lo que sí es seguro es que se referirá al paciente al servicio de rehabilitación y fisioterapia.
En dicho servicio el paciente será atendido por profesionales como fisiatras, terapeutas ocupacionales y fisioterapeutas quienes tendrán como objetivo mejorar su calidad de vida y su desempeño en las actividades cotidianas, razón por la cual se realizará un programa de ejercicios para entrenar la marcha en el que se hará lo siguiente:
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Ejercicios de entrenamiento de la marcha desde el suelo, frente al espejo y desde una caminadora.
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Fortalecimiento de la musculatura que esté afectada.
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Estiramiento muscular para prevenir las contracturas.
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Movilizaciones pasivas y activas asistidas.
Evidentemente, también habrá otros objetivos que van a depender del resultado de la evaluación del paciente. Recuerda que, cada paciente es individual y se deben adaptar todas las actividades a su condición.