En nuestro centro de rehabilitación en Bilbao sabemos que el estrés puede afectar de manera negativa a nuestra salud, puede aumentar la presión sanguínea, debilitar el sistema inmunológico e incluso provocar dolores de cabeza, pero no somos conscientes de las implicaciones que tiene en nuestro sistema musculo-esquelético y en nuestro sistema nervioso.
Esta afección es mayor en personas menores de 45 años siendo mayor en mujeres que en hombres y puede manejarse a través de distintas maniobras siendo las tecnicas de osteopatia una de ellas.
Respiración
Cuando se respira, es importante preguntarse si estamos haciendo respiraciones largas y profundas o solo pequeñas inhalaciones. Muchos de nosotros, hacemos pequeñas respiraciones con la musculatura de la zona dorsal alta y el cuello, en vez de emplear el diafragma. Si respiraramos de forma correcta, hinchando el abdomen, entonces el diafragma debería expandir las costillas y bajar, aumentando la presión intraabdominal. Esto generaría una mejora de la circulación y la digestión y una relajación de la musculatura cervicodorsal, que no se saturaria con una respiración superficial.
Digestión
El estrés también genera un ralentizamiento de la digestión. Debido a la alteración que genera sobre el sistema nervioso, la musculatura del intestino tiene mayor dificultad para el paso del alimento y las glándulas encargadas de la digestión segregan sustancias que no son adecuadas en ese momento. Todo esto favorece la aparición de gases en el intestino y sensación de tripa hinchada, etapas de estreñimiento alternadas con diarrea y en algunos casos llega a desarrollarse el Síndrome del colon irritable.
Sistema Nervioso
Cuando una persona sufre de estrés, su sistema parasimpático (parte del sistema nervioso que se encarga de tareas como el descanso o la digestión) se ve apagado o sustituido por el sistema simpático (parte del sistema nervioso encargado de tareas como activar el cuerpo cuando hay un peligro o tiene que reaccionar). En un estado de salud óptimo, el cuerpo presenta un balance entre estos dos sistemas. Si solamente tenemos activo el sistema simpático, se va a ver afectado el descanso, el aparato digestivo e incluso el reproductor. Esto se debe a que el cuerpo concentra sus recursos en estar en continua alerta ante un posible peligro. Es cuestión de tiempo que se vea afectado el sistema inmune.
Postura
Las personas que padecen estrés presentan una continua tensión muscular en general. Suelen llevar entre otras cosas, los hombros altos (muy cerca de las orejas) e incluso aprietan los dientes (Bruxismo). Este uso excesivo de toda la musculatura supone un gasto energético muy elevado para el cuerpo humano, que acaba desencadenando fatiga y dolor muscular.
Tratamiento en osteopatía del estrés en FisioClinics Bilbao
Las personas necesitamos un equilibrio entre el estrés y la capacidad de descanso. Este puede encontrarse introduciendo ejercicio, relajación, lectura o meditación en nuestra rutina habitual.
La clave para poder controlar el estrés es diseñarse un plan a largo plazo en el que se trabajen los aspectos físicos y psicológicos. Para ello, es importante el ejercicio, la nutrición e incluso la ayuda de la psicología.
La osteopatía a su vez, va a ayudar a calmar el sistema nervioso para favorecer el balance entre los dos sistemas, y va a influir en una correcta digestión, una reducción de la tensión muscular y una mejora en la circulación.
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